Gracias por visitarme

En los momentos en los que decido desacomodar la vida me refugio en, éste, mi rincón para crear un espacio para la escritura cuando, en realidad me siento en estado de lenguaje escrito. Aunque muchas veces no puedo distinguir qué es lo primero; si la soledad o la escritura. Sin embargo la palabra escrita, su cadencia, su musicalidad y sus cuidados, su intensidad y su intencionalidad me intimidan. No obstante si me lees no me sentiré tan sola, me sentiré reconocida.

lunes, 10 de agosto de 2009

* ATRAVESAR EL UMBRAL *


Me bastó cruzar la frontera para cambiar de sintonía y emprender un viaje hacia mi interioridad. Casi en una cronología sistemática, comenzaron a colgarse como posts en la vidriera , los recuerdos . Mi infancia rica en experiencias familiares en las que disfruté el juego y el intercambio con amigas, y conocidas, siempre tuve facilidad para acercarme a la gente, prácticas que estimularon mi vocación para la charla y/o conversación en cualquier parte, la cola de espera en un banco, un cine, una heladería etc; los cuentos dramatizados también fue una práctica que, más adelante, me sirvió y me sirve, todavía, sobre todo cuando comparto con niños; el baile y los movimientos para decir cosas con el cuerpo. Crecí en un hogar de clase media y un colegio a su medida, fueron los espacios determinantes donde grabé a fuego que a mis padres, maestros y adultos debía mis respetos y obediencia, sin embargo varias reprimendas me gané por pintar, como decía mi padre,"... un tanto contestataria...". No obstante, me reprocho por no haber hecho caso omiso a tanta disciplina que, muchas veces, coartó no solo mi libertad para expresar mis desacuerdos, sino también, entre otras tantas cosas, mi creatividad. Sin embargo aquellas negativas para los permitidos despertaba ,en mi, la curiosidad que hasta la fecha es el motor que empuja la indagación y mi permanente inclinación hacia los aprendizajes, de los que no siempre salgo ilesa , todo...todo tiene sus costos. Pero retomemos el tema que me convoca, la reflexión. Tanto orden y disciplina, en mis tiempos, digo esto porque hoy los jóvenes son mas libres , solo sirvieron para moldear y barnizar la urbanidad que hoy luzco, mis prudencias sospechosas, y sirvió, reitero, para otro fin primordial por excelencia, esto es, enseñarnos hasta el hartazgo a obedecer. En estos momentos me viene a la memoria una conocida expresión de UMBERTO ECO, nacido en Turín Italia y doctor en filosofía, "...EL HOMBRE ES HIJO DE SU TIEMPO..." Es así, como resultante de mi tiempo, las reiteradas dictaduras con sus soportes filosóficos respaldatorios, que solo me aboqué a la rutina cotidiana, todo lo atinente a las necesidades de mi hogar, la familia etc, sin detenerme al análisis de la realidad que nos rodeaba dejando de lado la reflexión, el cuetionamiento, la problematización, y los interrogantes de por qué todo debía ser de ese modo y no de otro. Sin embargo, al verdadero trasfondo de los acontecimientos que devoraban, impiadosamente, a los países más pobres lo habían podido descubrir los treintamil valientes, hoy desaparecidos en la última dictadura militar. Puedo comprender, y me reprocho, que nos habíamos dejado ganar, al menos yo, por los ruidos de la vida o tal vez la cobardía, el vértigo de los cambios , el deber del trabajo y sus imposiciones e implicaciones, la crianza de los hijos etc que como cerrojos, premeditados, de una cárcel implacable se imponen impidiendo correr el velo para ver la realidad, nuestra realidad. De hecho demasiada distracción tiene costos muy altos, ya lo ven estoy con un pie en Ecuador y otro en mi país. Me sentí culpable por lo poco crítica que había sido de mi tiempo. La Argentina se desplomaba y hoy mientras escribo, sigue desplomandose, pero no por generación espontánea, es más, nada ocurre en esta vida por generación espontánea, y los tenáculos globalizadores de los fabricantes de pobreza que nuestra acriticidad dejó crecer, se extendían abrazando, dicho de otra manera... ahogando ¡oh... qué casualidad ! a los distraídos países del tercer mundo, que por la misma necesidad, la pobreza, se ven siempre, obligados a salvar la coyuntura( la reflexión y análisis es penalizada) y a contraer deudas vitalicias por lo imposible de saldar.
Quiere decir,entonces, que paseábamos por la vida, radiante de sol intimo, totalmente indiferentes a toda señal de cambios y olvidos , desafiábamos la adversidad levantando nuestras banderas, de aparente, libertad y desinterés pero ¿ saben amigos? la vida siempre nos alcanza y pone a prueba todos nuestros argumentos y justificaciones. Desde Ecuador, que es una extensión del imperio incaico, cuya capital, fue el reino que Huyna Capac entregó en obsequio a su hijo Atahualpa, con su paz ancestral me devolvía, en ese instante, la serenidad que necesitaba para hacer este análisis, de lo que hice y lo que no, y poder pensar, comprender y descubrir que hay otras formas, otras maneras, respetuosas y saludables de estar en este mundo.

1 comentario:

  1. ME ENCANTA LO QUE DICES. ME HACEN SENTIR BIEN, PERO VOS TAMBIÉN DEJASTE EN TODOS NOSOTROS TUS MARCAS, YA VES AÚN SIGUE LA CUERDA POR INTERNET. ME ENCANTÓ ENCONTRARTE EN MI HISTORIA, APRENDÍ MUCHO DE TU BONDAD. GRACIAS MI QUERIDA RO.

    ResponderEliminar